Tras 28 años de trayectoria en los que logró dos medallas olímpicas y cuatro preseas mundiales, la clavadista Paola Espinosa se retira del alto rendimiento para seguir otros proyectos como conferencista, además de disfrutar su etapa como mamá, pero sí decepcionada de la actualidad del deporte.
“Muchas altas y bajas, de mucha felicidad, de muchos momentos de felicidad que pasé en la alberca en donde en cualquier competencia en la que yo me paré tuve una medalla, logré un objetivo en mi vida, lo cual eso me hace sentir muy bien […] Para mí sigue siendo la peor administración que ha existido en todos estos años, claro que estoy decepcionada del deporte, claro que yo he visto que habrá un retroceso, pero eso es evidente que no he ocultado, pero no tomé la decisión por eso”.
Paola no se va con un resultado pendiente por la presea olímpica individual porque obtuvo varios récords como el ser la primera campeona mundial mexicana de clavados.
“Yo sí hice todo lo que quise, esa espinita clavada que quizá todos piensan que tengo les digo que no, yo estoy muy feliz, me paré en un campeonato del mundo con las mejores del mundo, tuve clavados de dieces en dos diferentes clavados, clavados perfectos, me hice campeona del mundo, doble medallista olímpica”.
La capitalina agradeció a todos los involucrados que le ayudaron para obtener los resultados y reconoce el legado que dejó porque pese a su edad todavía era competitiva, pero hay que darle paso al gran talento que hay en el país.
“Yo sí quiero ayudar, yo sí quiero hacer algo por mi país, por los deportistas, yo lo viví, a mí sí me costó mucho trabajo llegar hasta donde estoy, a mí nadie me regaló nada, entonces eso me hace muy segura de mí misma […] Cada uno va dejando su historia, su propio legado, yo sí creo a raíz de que me atreví, que me esforcé, que no me dejé sentir mal, por esos comentarios, que desde 10 metros no va a ganar medalla y es mujer”, finalizó.
Fuente: Marca.com
